Primer contacto: Recogemos ilusionados la Grand California 600 en F Tomé.

Al entrar lo que más nos llama la atención es lo limpio y blanco que es el interior. Al llevarla a nuestra base, no podemos evitar compararla con los vehículos de mismas dimensiones que tenemos en nuestra flota. Una Camper Adria y una autocaravana Sun Living A60. Todas ellas de 6 metros, con baño completo y con una capacidad para 4 personas. En los tres casos con camas dobles, lo que las hacen ideales para los viajes en pareja o para familias con dos niños. La Grand California mide 6 m. de largo, 2,04 m. de ancho, sin retrovisores y 3,10 m. de alto. La distribución de las camas es una en la parte trasera con una cama integrada dispuesta lateralmente de 1,95 x 1,35 y una cama sobre la cabina de dos plazas, una de 1,90 y otra 1,60 de largo por 125 de ancho.

¡Emprendemos el camino!

La ruta de 5 días que hemos elegido es Sierra Nevada, para poder probarla con frío y nieve, se nota que somos muy aficionados al esquí y la Costa Tropical. La primera sorpresa es el freno de mano, permaneciendo siempre abajo, lo que facilita el giro de los asientos. Todos los que usamos vehículos con asientos giratorios, sabemos que el freno de mano siempre resulta un problema al girar los asientos, ya que este choca con el asiento. En la Grand California, ha ideado un ingenioso sistema de trinquete y tensor que evita este engorro. Este detalle nos da una pista de lo que nos iremos encontrando.

Los primeros kilómetros son toda una experiencia, nos llama la atención el “silencio”. Estamos acostumbrados a viajar en nuestras camper, capuchinas y californias, pero sin duda, el no oír silbidos de ventanas, ni crujidos, nos hace ver una primera diferencia de acabados con otros fabricantes.

Tiene una aerodinámica extraordinaria. Está ensamblado y concebido con un coche de la marca alemana, todo encaja, todas sus piezas están perfectamente fabricadas y ensambladas.

Interior de la Grand California:

Su interior es blanco de diseño, con una distribución clara y detalles bien pensados, parece un “yate sobre ruedas”. Sus armarios son blancos, con doble apertura, y su revestimiento de suelo imita la cubierta de madera de un barco.

En el asiento corrido trasero es cómodo y cuenta con anclaje ISOFIX, importante para la seguridad de los niños.

La cocina tiene 2 fuegos de gas y fregadero e incluyen una nevera extraíble de 70 litros con cesta, también extraible, y compartimento congelador, puede parecer un poco justa, pero al ser un gran arcón tiene muchas posibilidad. Además cuenta con modo noche para reducir el ruido cuando dormimos.

La superficie de trabajo de la cocina puede extenderse hacia delante y hacia atrás, aunque el sistema es delicado y creemos que puede romperse con facilidad en el tiempo.

Tiene cuatro armarios en la parte trasera. Uno sirve íntegramente de espacio de almacenamiento. Otros dos contienen las botellas de gas y el tanque de agua potable y cuarto está configurado como un armario de equipamientos e instalaciones.

Las características de serie adicionales del Grand California incluyen detalles prácticos como la luz exterior sobre la puerta corredera, y la conexión para una ducha exterior (con temperatura del agua ajustable), incluyendo una manguera y un cabezal de ducha en la parte trasera.

La calefacción y el agua caliente, en comunicación con la centralita truma CP Plus ubicada bajo el asiento trasero, pueden ser activadas y controladas indistintamente desde cualquiera de las 2 centralitas.

Gracias a sus 2 botellas de 22 litros de gas que van en el maletero hacen de este vehículo una gran opción para los viajes de invierno, aunque como es habitual en todos nuestros vehículos, preferimos instalar un sistema de GLP por la autonomía que ello proporciona en los grandes viajes continentales a los que este vehículo está llamado y concebido.

Entre los extras que incluye esta versión con la que viajamos incluye freno de Emergencia en ciudad, Lane Assist, el asistente de cambio de carril con Detector de Ángulo Muerto que incluye Alerta de Tráfico Trasero y protección lateral activada por sensor.

Para el acceso cuenta con un escalón Thule, que como en la inmensa mayoría de camper, está destinado a morir. Este tipo de vehículos con gran distancia entre ejes, suele arrastrar en cualquier rampa un poco pronunciada hará que arrastre sobre el suelo. Desde la centralita de puede activar automáticamente para que al abrir la puerta salga y al cerrar se recoja. Se echa de menos un interruptor junto a la puerta para activar o desactivar manualmente, ya que solo se puede hacer desde la centralita y si se desea tener esta función desactivada y acceder al vehículo….solo podrás desplegar el escalón una vez que estás dentro.

El aseo de la Grand California, con lavabo plegable, inodoro y una ducha, junto a unos estantes y un pequeño armario es más que suficiente. Muy buen distribuido, con detalles como la luz que se enciende automáticamente gracias al sensor de movimiento. El cassete es un Tedhford C200 con sistema de extracción de gases SOG.

En cuanto a conectividad seis puertos USB y cuatro enchufes de 230V permiten recargar smartphones, tablets y otros dispositivos. Todas las funciones clave de la “autocaravana” pueden controlarse digitalmente a través del panel operativo central, situado en la zona de comedor.